Ahora mismo se discute en la Comisión Primera del Senado el proyecto de ley que pretende penalizar el aborto en todos los casos. La comisión primera se compone de 18 personas. Sólo uno de ellos es mujer, la senadora Karime Mota del partido de la U, que al parecer ni se ha dignado en ir hoy al debate. Son ellos los que darán el primer debate sobre este asunto. Según los cálculos 7 votos están asegurados en favor a ese proyecto. 7 votos estarían en contra. Pero el lado de los conservadores podría tener más chance de alcanzar tres votos más para completar los 10 que necesita para aprobar el proyecto.
Sorprendida me dejó anoche el ex-presidente del Congreso, Armando Benedetti, quien abogó por que este proyecto no pasara, pues ese proyecto iría en contra de convertir a Colombia en un país moderno y liberal. Además el Congreso correría el riesgo de ser catalogado de anticuado y sus congresistas de «cavernícolas y dinosaurios» – según dijo anoche en el noticiero CM&.
Es casi que inconcebible en el año 2011 todavía tengamos este tipo de debates. Que se presenten nos lleva a recordar la época de la inquisición. Hay que concebir la vida de la misma forma que la Iglesia lo hace? Hay que tener las mismas opiniones que la Iglesia para no ir a las masmorras? Según el autor del proyecto, el director del partido conservador José Darío Salazar de aprobarse el proyecto los médicos que practiquen el aborto irán a la cárcel. Y obviamente también las mujeres. Porque es que en la cabeza de un conservador la mujer no vale nada. La mujer no debería siquiera tener la libertad de decidir sobre su cuerpo. A una mujer ni siquiera se le puede creer que fué violada. Porque cualquiera puede decir que fué violada.
Cualquiera puede decir que no violó! Señor Gómez Hurtado!
Ni para el procurador, ni para el partido conservador, ni para la iglesia tenemos las mujeres un poquito de valor. Somos única y yanamente máquinas de reproducción. Queramos o no queramos. Y además sometidas a nuestros maridos, padres o hermanos. O a los hombres que deciden sobre nuestros cuerpos en la comisión Primera del Senado.
El aborto debería ser un derecho, no sólo en los tres casos hoy permitidos (violación, peligro para la salud mental y física de la mujer, malformación grave del feto), sino bajo cualquier circunstancia. Dejemos que la mujer decida! Es nuestro cuerpo! El hecho de que haya anticonceptivos no tiene nada que ver con que llegado el caso, una mujer embarazada decida abortar. Los anticonceptivos pueden fallar también!
Permitir el aborto bajo cualquier circunstancia no obliga a las mujeres a abortar. La mujer católica y apostólica que considere el aborto pecado y asesinato (de hecho son al fin y al cabo opiniones y creencias religiosas) sencillamente no aborta. Pero aquella mujer que no tiene las mismas creencias debe poder en un Estado Laico tomar este tipo de decisiones sin necesidad de ir a la cárcel.
Y si los congresistas del partido conservador, el procurador y la iglesia de verdad se interesaran por los «inocentes», los «que no tienen voz», los niños, mejor deberían hacer esfuerzos para ver cómo les vamos a dar educación gratuita y de calidad a TODOS ellos sin excepción. Cómo vamos a sacar de las calles a los niños trabajadores? Cómo vamos a hacer realidad una Colombia donde los niños ni sean reclutados ni se vayan libremente a las filas de grupos armados porque ven esa alternativa como una mejor a quedarse en casa con padres castigadores o aguantar hambre? Además cómo vamos a hacer para combatir la pedofilia, entre otras cosas, dentro de la Iglesia Católica?
De paso, si les preocupa los niños, que necesitan tanto padres como madres, porqué no proponen un proyecto de ley de permiso de maternidad y paternidad de mínimo 6 meses para la madre – según la Organización Mundial de la Salud, los bebés deben ser amamantados de forma exclusiva (osea solo leche materna) durante sus primeros 6 meses! Hoy por hoy las mujeres tienen que regresar al trabajo después de los tres meses! Y además hacer que los padres también tengan paternidad. Yo sé que suena como de otro mundo, pero en otras sociedades existe: que los hombres que se han convertido en padres se queden en su casa con sus hijos mínimo unos tres meses después de que la mujer regrese al trabajo. Porqué nó? Estarían dispuestos los conservadores a quedarse en casa con sus hijos cambiando pañales y jugando con aquellos seres inocentes que procrearon? O prefieren dejárselos a una niñera?
Y si de verdad se preocuparan de los no nacidos, porqué no presentan un proyecto de ley que proponga la atención prenatal GRATUITA y de calidad a todas las mujeres colombianas que decidan libremente tener un hijo? Además de cursos profilácticos para las parejas a punto de convertirse en padres? Porqué no proponer además una atención digna en todos los centros de salud donde las mujeres tienen a sus hijos? Una atención de calidad y digna, respetuosa de la mujer parturienta. Esto implica inyectarle recursos a la salud, para que las mujeres de todas las clases sociales tengan una atención de primera y nó como hoy, donde muchas mujeres de escasos recursos tienen a sus hijos en salas en grupo y hospitales públicos sin los recursos necesarios para atender emergencias en los neonatales.
Eso sí sería pensar en los no nacidos. En los inocentes. En los que no tienen voz. Y de paso mostrar más respeto por la mujer. Porque no somos incubadoras!

Tu cuerpo es un campo de batalla